Ya de buena mañana todo ha empezado un poco distinto a como imaginaba. Había pensado levantarme un poco más temprano para poder llegar con tiempo al metro y así llegar puntual a mi primer día de prácticas, pero nada ha salido exactamente así. Primero, me he levantado más tarde de lo que tocaba y he tenido que salir pitando de casa y sin poder desayunar. Y segundo, casi he perdido el metro. Por lo demás el día no ha estado mal, no puedo quejarme ya que la clase que me ha tocado es genial, la tutora también es muy amable y me ha explicado todo lo que hacen cada día, y como se organizan las clases y las actividades. Digo que no me quejo porque si lo comparo con el año pasado, éste es todo un lujo; lo que más me gusta es que la tutora del grupo me tiene en cuenta y me escucha (no como la que me tocó el año pasado¬¬'). Y por la tarde, clase en la universidad de cinco a ocho (bufff) y además de música, que es un tostón, la asignatura y la profesora todavía más.
Si todo lo que me ha pasado a mi hoy, le hubiera pasado a otro, puede que catalogara el día como un desastre total, de esos en que más valdría no salir de la cama, pero yo, después de quedarme dormida, casi perder el metro, que un niño me bomitara en medio de la clase y que otro se hiciera pis encima en mi primer día de prácticas, y tener que aguantar a una mujer más pesada que el plomo durante tres horas, lo he encontrado un día interesante; no todos los días pueden ser perfectos, no? Pues eso, al mal tiempo buena cara. Pero eso sí, odio los lunes, son demasiado pesados y cargados. Mañana más y mejor!
Buen comienzo de semana!
P.D.: Ah! Ya tengo plan para el puente de diciembre: me voy a Barcelona^^
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