Anatole France dijo: "juzgamos las acciones humanas no por lo que son, sino por el disgusto o el placer que nos causan".
Y a eso es a lo que voy: muchas veces, las personas damos demasiada importancia a cosas que en realidad no la tienen, pero el mero hecho de que esas cosas las haga o las diga alguien, ya hacen que cojan más importancia de la que otra persona (en nuestra misma situación) le daría. Esto me hace pensar que deberíamos tener cuidado con nuestra forma de actuar, de decir las cosas, ser más prudentes, ya que a veces lo hacemos de forma precipitada aunque no nos damos cuenta de ello hasta que la cagamos, nos confundimos y al mismo tiempo confundimos y lastimamos a los demás; y luego, como la mayoría de las veces, ya es demasiado tarde para remediarlo; porque habrá momentos en que estaremos haciendo o diciendo algo, puede que de forma inconsciente, que causará la mayor felicidad en otras personas, aunque esa no sea nuestra intención, haciéndoles pensar o sentir cosas que en realidad no existen, para luego desmontarles en pedazos toda esa felicidad, la cual, acabará convirtiéndose en disgusto.
1 comentario:
Pero uno tampoco puede vivir la vida pensando en lo que sucederá a los demás...
Cuando saltas al mar levantas olas, pero no puedes controlar lo que acabará sucediendo con ellas. Tal vez una arrase una ciudad y otra acabe en alguna playa tranquila...
Un besito
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